Creado por Natalia Ramade, Química Farmacéutica — el 10 de enero de 2022
Si has escuchado hablar de los alisados brasileños seguramente hayas escuchado también hablar del controversial formol o formaldehído.
Existe aún hoy, una enorme preocupación por el formaldehído porque algunas marcas de alisados siguen utilizándolo en sus fórmulas de alisado semipermanente, especialmente en los llamados tratamientos de queratina y alisados brasileros, simplemente porque es efectivo y muy barato.
Te cuento, es una molécula muy pequeña con esta forma:
Se ha usado como preservante en cosméticos (los preservantes se agregan prevenir el crecimiento microbiano y extender la vida útil de un producto) y como agente endurecedor de uñas. Hasta aquí no hay problema porque las concentraciones en que se usa el formaldehído son muy bajas y no afecta nuestra salud Pero cuando se usa como activo en los tratamientos de queratina y alisados brasileros, las concentraciones usadas son altísimas, y sí nos pone en peligro.
En enero de 2016 la Comisión Europea de Ingredientes Cosméticos -CosIng - clasifico al formaldehído como sustancia cancerígena y lo añadió a la lista de sustancias prohibidas en productos cosméticos figurando en el ANEXO II (Sustancias Prohibidas) del Reglamento (CE) No. 1223/2009
A pesar de ello, increíblemente seguimos escuchando entre -algunos- peluqueros cosas como: "entiendo que si el alisado se hace en áreas bien ventiladas no es dañino en absoluto", "...pero puedes encontrar versiones sin formaldehído si te preocupa eso".
Es en serio?
Cualquiera que se haya realizado un alisado con formaldehido lo reconoce por el olor intensamente penetrante, ardor en los ojos, dificultad para respirar, sensaciones de ardor o picazón, vapores y humos que libera el tratamiento. Algunas marcas logran enmascarar la evidencia utilizando cantidades bajas de formaldehido o compuestos similares al formaldehído igualmente peligrosos.
‘Los clientes también se han quejado de úlceras en la garganta y la boca, mareos, dolores de cabeza, vómitos, daño ocular, pérdida del gusto y el olfato, y fatiga’, según Margara, del salón M.B. Estilistas. ‘y debido a que la exposición es acumulativa, los trabajadores del salón tienen más probabilidades de sufrir síntomas graves.’
Una investigación del EWG de 2011 encontró que algunos productos que dicen ser libres de formaldehído aún pueden contener el producto químico, y la mayoría de estos tratamientos todavía tienen el potencial de provocar reacciones alérgicas y sensibilización con el uso repetido.
No querrás usar productos con formaldehido mientras estás embarazada. La exposición al formaldehído podría afectar su fertilidad o provocar un aborto espontáneo según los Centros para el Control de Enfermedades (CDC).
Lee las etiquetas. Si estás comprando un producto ya sea en una tienda o en internet, se requiere que el producto tenga una lista de los ingredientes. Si no es así, te recomiendo que no lo compres porque la lista de ingredientes es requerida bajo la ley de empaque y etiquetado en la mayoría de los países del mundo.
Para identificar productos que contienen ingredientes relacionados con el formaldehído, busca los nombres:
Consulta con tu estilista si el tratamiento que vas a usar contiene formaldehído o derivados. Si no estas segura, te recomiendo que no te lo hagas, para evitar posibles efectos adversos como los que menciono más arriba.
En los siguientes enlaces puedes encontrar una lista de algunas marcas que han sido testeadas por el gobierno de Estados Unidos cuyos resultados mostraron contenido de formaldehído: